En horas de la mañana de ayer, Ramón Z. de 44 años y Orlando R. de 21 fueron atacados por un perro pitbull en el barrio Itaembé Guazú de Posadas. El ataque sucedió en la vivienda donde se encontraban trabajando como albañiles, en la intersección de las calles Los Jazmines 2 y Calandrias. Rápidamente y ante la gravedad de la situación, el dueño del perro llamó a efectivos de la Policía de Misiones.
Al llegar lugar, los uniformados constataron que las personas atacadas se hallaban realizando trabajos de albañilería en la vivienda, propiedad de Sebastián R., de 41 años, quien manifestó que en momentos en que su esposa los atendió y abrió la puerta, el perro se escapó y comenzó con el feroz ataque. Ambos debieron ser trasladados de urgencia al hospital Madariaga, pero fue Ramón Z. quien sufrió mayores lesiones, en tanto Orlando R. presentaba daños menores y por ello fue llevado al nosomio en el móvil policial 3-668, que luego protagonizó una colisión sobre avenida Rademacher (ver página 21).
Así lo confirmó el doctor Orlando Querencio, jefe de Departamento de Unidades Críticas del Hospital Escuela de Agudos Ramón Madariaga a El Territorio: “Al hombre mayor le hicieron entre 30 y 40 puntos en el cuero cabelludo, precisamente en la región occipital. Es una lesión circular de entre 12 a 14 centímetros de longitud, con sangrado abundante». Y agregó: «Además tiene otras lesiones en la pierna».
En cuanto al estado de salud de la otra persona, dijo que «tenía solamente unas heridas a nivel del miembro superior, pero nada importante”.
En este sentido, detalló que Orlando. R, en horas de la tarde ya estaba en condiciones para ser dado de alta, mientras que Ramón Z., quien sufrió heridas de mayor gravedad, debía ser sometido a más estudios y recién recibiría el alta al cierre de esta edición.
Antecedente
Un hecho similar ocurrió hace poco menos de un mes, cuando un perro de raza pitbull atacó ferozmente a dos niños en el barrio Itaembé Miní, provocandoles graves lesiones. En la ocasión, los hermanos Fabio (9) y Dahiana (7) sufrieron heridas cortantes en sus extremidades y espalda por la mordida del perro, por lo que fueron trasladados al hospital de Pediatría Fernando Barreyro de Posadas, donde le practicaron varios puntos a ambos y les recetaron varios días de antibióticos y curaciones.
Según informó a este medio Gustavo Elizaicín, director del Instituto Municipal de Sanidad Animal (Imusa), el perro se encuentra preso en el predio del lugar y además sus dueños debieron pagar una multa.
Multas según la Ordenanza X-11
Respecto a qué sucederá con el perro y sus dueños, Gustavo Elizaicín afirmó: “Todavía no me llegó ninguna denuncia, por eso aún no podemos presentarnos en el domicilio”. Pese a ello, explicó que en el caso de recibirla, el Imusa tiene las facultades para presentarse en el domicilio, hacer la inspección correspondiente y elevar un oficio al Juzgado de Faltas, organismo que decide cuál será la multa. “De todas formas el perro no está registrado según indica la ordenanza X-11 Cuidado Responsable de Animales, donde dice bien claro que todas las personas que tienen este tipo de perros de extremada fuerza mandibular, tienen que registrarse en el imusa. Yo no lo tengo acá con esa dirección”.
En este sentido, la multa inicial sería de 8.000 pesos, más lo que se determine en el juzgado, en el caso de que se haga la inspección correspondiente. “Ya no sabemos como hacerle entender a la gente que para tener estos animales tenés que tener una instrucción previa, no son como un perro común”, manifestó. “Lamentablemente se van a tener que empezar a tomar medidas severas. Yo le sugerí al juez que las personas que quieran tener estos perros, paguen una matrícula de 30.000 pesos. Es una forma de empezar a frenar a la gente”, concluyó Elizaicín.
Al llegar lugar, los uniformados constataron que las personas atacadas se hallaban realizando trabajos de albañilería en la vivienda, propiedad de Sebastián R., de 41 años, quien manifestó que en momentos en que su esposa los atendió y abrió la puerta, el perro se escapó y comenzó con el feroz ataque. Ambos debieron ser trasladados de urgencia al hospital Madariaga, pero fue Ramón Z. quien sufrió mayores lesiones, en tanto Orlando R. presentaba daños menores y por ello fue llevado al nosomio en el móvil policial 3-668, que luego protagonizó una colisión sobre avenida Rademacher.
Así lo confirmó el doctor Orlando Querencio, jefe de Departamento de Unidades Críticas del Hospital Escuela de Agudos Ramón Madariaga a El Territorio: “Al hombre mayor le hicieron entre 30 y 40 puntos en el cuero cabelludo, precisamente en la región occipital. Es una lesión circular de entre 12 a 14 centímetros de longitud, con sangrado abundante». Y agregó: «Además tiene otras lesiones en la pierna».
En cuanto al estado de salud de la otra persona, dijo que «tenía solamente unas heridas a nivel del miembro superior, pero nada importante”.
En este sentido, detalló que Orlando. R, en horas de la tarde ya estaba en condiciones para ser dado de alta, mientras que Ramón Z., quien sufrió heridas de mayor gravedad, debía ser sometido a más estudios y recién recibiría el alta al cierre de esta edición.
Antecedente
Un hecho similar ocurrió hace poco menos de un mes, cuando un perro de raza pitbull atacó ferozmente a dos niños en el barrio Itaembé Miní, provocandoles graves lesiones. En la ocasión, los hermanos Fabio (9) y Dahiana (7) sufrieron heridas cortantes en sus extremidades y espalda por la mordida del perro, por lo que fueron trasladados al hospital de Pediatría Fernando Barreyro de Posadas, donde le practicaron varios puntos a ambos y les recetaron varios días de antibióticos y curaciones.
Según informó a este medio Gustavo Elizaicín, director del Instituto Municipal de Sanidad Animal (Imusa), el perro se encuentra preso en el predio del lugar y además sus dueños debieron pagar una multa.
Multas según la Ordenanza X-11
Respecto a qué sucederá con el perro y sus dueños, Gustavo Elizaicín afirmó: “Todavía no me llegó ninguna denuncia, por eso aún no podemos presentarnos en el domicilio”. Pese a ello, explicó que en el caso de recibirla, el Imusa tiene las facultades para presentarse en el domicilio, hacer la inspección correspondiente y elevar un oficio al Juzgado de Faltas, organismo que decide cuál será la multa. “De todas formas el perro no está registrado según indica la ordenanza X-11 Cuidado Responsable de Animales, donde dice bien claro que todas las personas que tienen este tipo de perros de extremada fuerza mandibular, tienen que registrarse en el imusa. Yo no lo tengo acá con esa dirección”.
En este sentido, la multa inicial sería de 8.000 pesos, más lo que se determine en el juzgado, en el caso de que se haga la inspección correspondiente. “Ya no sabemos como hacerle entender a la gente que para tener estos animales tenés que tener una instrucción previa, no son como un perro común”, manifestó. “Lamentablemente se van a tener que empezar a tomar medidas severas. Yo le sugerí al juez que las personas que quieran tener estos perros, paguen una matrícula de 30.000 pesos. Es una forma de empezar a frenar a la gente”, concluyó Elizaicín.
Fuente: El Territorio.