El ministro de Economía, Sergio Massa, salió fortalecido la semana pasada al obtener en la Cámara de Diputados la aprobación de la modificación del Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría. Ahora va por más. Acordó con los gobernadores de las provincias del norte argentino coparticipar dos tributos: el que grava los débitos y créditos bancarios y el impuesto PAIS. No está de más suponer que esa es la prenda de cambio para conseguir los votos en el Senado que permitan aprobar el Presupuesto 2024 y sostener las reformas que lanzó Massa en las últimas semanas, que incluyen una devolución permanente del IVA.
Ganancias e IVA son los dos pilares en los que se asienta el edificio recaudatorio argentino y su producido se comparte con las provincias, en una relación de 56% a 44%. Por eso, cualquier mínima cosa que se quiera hacer con ellos requiere de su aprobación. “Los gobernadores me han propuesto y vamos a incorporar como una adenda a la presentación del presupuesto, un mecanismo de coparticipación de parte del impuesto al cheque y parte del impuesto PAIS para cuidar las cuentas de las provincias y quiero también asumir ese compromiso aquí”, dijo en un acto en Salta con todos los mandatarios del Norte Grande, donde estaban los radicales Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdez (Corrientes). Los dos gobernadores opositores le hicieron acordar al funcionario que se había olvidado de mencionar ese detalle en el marco de un encendido discurso.
El impuesto PAIS le ha venido a traer algo de alivio a las arcas del fisco. Su extensión a la mayoría de la compra de dólares con destino al pago importaciones con una alícuota del 7,5% generó una masa de recursos extraordinarios. En agosto ese tributo juntó $212.000 millones, 506% más en términos nominales que en el mismo mes de 2022. Entonces, en el octavo mes, el déficit primario disminuyó 93% en términos reales. Esto fue consecuencia de que los ingresos totales nacionales aumentaron un 6,5% interanual real y el gasto primario bajó un 8,5% interanual. “En valor absoluto, el déficit primario fue de $36.000 millones. En términos del PBI anual, equivaldría a 0,02%. Lo que lo ubica por debajo del déficit del año anterior y de 2021”, señaló el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
Es por eso también que el impacto de las rebajas de impuestos que anunció Massa (como la suba del piso de Ganancias, el Compre sin IVA, la suspensión del pago de monotributistas, el alivio para autónomos) y el anuncio de créditos y otros gastos quedaría acotado.
Ahora bien, para el IARAF no sería necesario, incluso, que las provincias sean compensadas por la rebaja de Ganancias, por lo menos este año. La entidad que dirige Nadín Argañaraz hace el siguiente cálculo: “Dado que por la reforma de Ganancias las provincias y CABA perderían 0,06% del PBI de acá a fin de año, si el sistema de ‘Compre sin IVA’ se aplicara plenamente, saldrían ganando 0,04% del PBI, dado que por el reintegro cobrarían un extra de 0,11% del PBI por mayor recaudación”, señala la entidad en un informe. Eso se debe a que al devolver dinero de las compras, este se iría a incrementar el consumo que a su vez genera mayor de recaudación de Ingresos Brutos y del propio IVA, ya que si bien esta medida se presenta como una devolución del impuesto, en realidad es un reintegro sobre el precio de compra que realiza Nación. El IVA sigue recaudando y se sigue coparticipando hasta fin de año. (ambito.com) (Foto: Télam)