La provincia de Misiones ha experimentado una creciente escasez de combustible, tanto en gasolina súper como en diésel, lo que ha llevado a una serie de desafíos para los automovilistas, viajeros y trabajadores que buscan llenar sus tanques de gasolina. El desabastecimiento ha provocado largas filas y, en algunos casos, la frustración de aquellos que llegaron a las estaciones solo para descubrir que ya no quedaba combustible disponible.
El problema es especialmente grave en localidades grandes como Iguazú, Alem, Posadas y Oberá. Los conductores han tenido que esperar durante horas para cargar combustible y, en algunos casos, han tenido que irse sin poder surtir sus vehículos.
El desabastecimiento no se limita solo a la gasolina súper, sino que también afecta al diésel común, lo que ha complicado aún más la situación, especialmente para los productores y agricultores que dependen del diésel para sus actividades.
Las causas de esta escasez son multifacéticas. Se menciona que la falta de importación de combustibles debido a la falta de dólares es uno de los factores clave. Además, se ha implementado una medida de entrega por etapas en algunas estaciones de servicio, donde se les suministra solo una fracción del combustible que necesitan, para evitar que se queden sin combustible antes de que finalice el mes.
La situación ha sido motivo de preocupación tanto para los conductores como para los propietarios de estaciones de servicio, ya que la demanda sigue siendo alta y el desabastecimiento parece persistir. Las colas y la falta de combustible han causado molestias y frustración en la población, y se espera que se implementen soluciones para abordar este problema en el futuro.