En los últimos cuatro meses, las boletas de luz aumentaron más del 100% en Misiones. Con el reajuste de diciembre se concreta una seguidilla de aumentos, justificados en la inflación, el costo de la energía, insumos, los salarios y el mantenimiento. El Gobierno provincial tomó la decisión antes de que la Nación elimine los subsidios al servicio público.
La tarifa de energía eléctrica de EMSA y de las nueve cooperativas del interior tuvo un reajuste de 48% en la facturación de diciembre y se verá reflejado en una considerable suba que tendrán que abonar los usuarios con vencimiento en febrero, que se agrava por ser la temporada de mayor consumo a raíz de las altas temperaturas.
La información fue confirmada mediante los cuadros tarifarios publicados por la empresa EMSA en su página web oficial y mediante una publicación de la Cooperativa de Oberá (CELO) en sus redes sociales.
En los cuadros de EMSA se observa que el precio de los primeros 30 Kw/h de la Categoría N1 (ingresos altos) pasó de 50 pesos en noviembre a 74 pesos desde diciembre. A la vez, para la categoría N2 (ingresos bajos) el valor pasó de $17 a $25. Y la categoría N3 (ingresos medios) se modificó de $19 a $28. En todos los casos se registra un incremento apenas por debajo del 50%.
En tanto, desde la Federación de Cooperativas Eléctricas (FECEM) explicaron que la provincia (la Subsecretaría de Obras y Servicios Públicos) le autorizó incrementar un 48% la tarifa desde el consumo de diciembre.
Más de 100% en cuatro meses
Con el reajuste de diciembre se concreta una seguidilla de aumentos que supera el 100% en los últimos cuatro meses (de septiembre a diciembre), pasando de $12,07 a $25,03 el costo de los primeros 30 kw/h para un usuario de categoría N2 (ingresos bajos) que consume menos de 500 kw/h al mes.
De acuerdo a un relevamiento, los tres meses anteriores: septiembre, octubre y noviembre se aplicó 12% sucesivamente sobre el valor de cada mes. Y en diciembre se disparó 48%, como se observa en el cuadro.
Para quienes superan los 700 kw/h de consumo, el costo pasó de $12,82 a $26,73 para los primeros 30 kw/h de consumo. Y para quienes superan los 1.400 Kw/h por mes, los primeros 30 saltaron de $13,44 en septiembre a $28 en diciembre.
En todos los casos tomados como ejemplo se considera la categoría N2 residencial (ingresos bajos).
Información pública
En esa línea, la CELO de Oberá fue la única en informar formalmente a los socios: “El aumento del dólar impacta de manera directa en el costo de la energía. Esto sumado a la inflación acelerada que se refleja en nuestra economía, obliga a la provincia a readecuar, cada vez en lapsos más cortos, el cuadro tarifario de los servicios”, indicó la entidad.
“Por estas razones, la tarifa del servicio de energía eléctrica tendrá un incremento de un 48%, que impactará en la facturación del período diciembre 2023 con vencimiento en febrero de 2024”, se agregó.
“Esta readecuación de precios se vuelve necesaria puesto que los principales insumos (transformadores, cables, aisladores, seccionadores, fusibles, combustible), todos imprescindibles para brindar el servicio han aumentado considerablemente su valor”, se advirtió.
La CELO aprovechó para “recordar la importancia de tomar todas las medidas para fomentar el consumo responsable del servicio, algo que no solo puede beneficiar a los socios en términos de costos, sino también contribuir al buen uso de los recursos energéticos”.
En el Boletín Oficial de ayer se publicó una resolución explicando que “la situación de las distribuidoras provinciales es delicada comparando el VAD (Valor Agregado de Distribución) incluido en la tarifa vigente, frente a los costos reales de la prestación del servicio público, que incluyen operación, mantenimiento y reposición de infraestructura, gastos comerciales, salarios y otros. Esta situación se agrava fundamentalmente como consecuencia del proceso inflacionario”.
Debido a esto, “el Poder Concedente trata de conciliar las necesidades de las Distribuidoras y la población en general, y en particular de la actividad económica atenuando las necesidades de recomposición tarifaria por los incrementos de costos”.
Reducen subsidio provincial
Mediante el Decreto N° 564/23 se prorrogó el beneficio de la Tarifa Social Provincial, creado por Decreto N° 21/19, hasta el 31 de diciembre de 2023; beneficio que a partir del período de facturación 10/2.023 se traduce en un descuento equivalente al 56%.
En este sentido, la Provincia informó que “frente a la compleja situación económica que se encuentra atravesando el país, si bien resulta necesario seguir beneficiando y garantizando el acceso al servicio público de electricidad de los sectores más vulnerables y, mediante ello, evitar que aquellos se vean privados de su uso en virtud de no poder afrontar su costo como consecuencia de la eliminación de los subsidios nacionales, se estima oportuno modificar a partir del período de facturación 11/2023, el porcentaje de descuento, del 56% actualmente vigente, al 53%”.
Quita de subsidios nacionales
En algunos despachos oficiales comenzaron a realizar una simulación de cómo podrían quedar las facturas una vez que se eliminen los subsidios nacionales.
En la simulación que circula en las oficinas gubernamentales, advirtieron que un usuario residencial de hasta 300 kw mensuales que pagaba algo más de $9.000, pasaría a casi $31.000 sin los aportes nacionales. A su vez, el que consume hasta 500 kw y abonaba $14.000, pasaría a tener que pagar más de $50.000.
En la categoría residencial de mayor consumo: uno de 700 kw al mes que pagaba 19.000 pesos, pasaría a más de 70.000; y el que demandó 1.400 kw mes y abonaba 38.000 pesos debería pagar sin subsidios nacionales unos $140.000.
Los jubilados no quedarán exentos del impacto: uno que consume 300 kw por algo más de 6.000 pesos debería pasar a abonar 27.000. El que consumía 500 kw por 11.000 pesos pasaría a pagar más de 45.000 pesos. Fuente: PE