Hoy, en el noroeste de Colombia, un trágico alud de tierra en una comunidad indígena ha cobrado la vida de al menos 18 personas, dejando a otras 30 atrapadas, según informaron fuentes gubernamentales. La gobernación del departamento del Chocó reportó que la carretera que conecta Medellín con Quibdó fue interrumpida, y varios vehículos quedaron varados en la zona debido al deslizamiento de tierra.
Funcionarios gubernamentales señalaron que muchas personas lograron refugiarse en sus viviendas, pero el alud las sepultó. La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez Mina, anunció la emergencia en la vía Quibdó-Medellín, detallando que se están tomando acciones coordinadas con autoridades locales, la Defensa Civil, el Ejército Nacional y otros organismos para atender la situación.
La región ha experimentado lluvias intensas durante más de 24 horas, complicando las labores de rescate y acceso a la zona afectada, donde varios deslizamientos de tierra han ocurrido. Se ha realizado un llamado para la intervención de helicópteros en las operaciones de rescate.
El alcalde de Carmen de Atrato, Jaime Herrera, comunicó que hay personas gravemente heridas y otras atrapadas bajo tierra, sin proporcionar una cifra precisa. A pesar de la temporada de sequía que atraviesa Colombia, se registraron fuertes lluvias en algunos departamentos del Pacífico y la Amazonía, según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales.