La Legislatura Misionera aprobó una serie de leyes en su XIX Sesión Ordinaria, destacándose el reconocimiento de Puerto Rico como la Capital Provincial de la Industria. Además, se estableció un Programa Provincial para la Gestión Integral y Reutilización de Aceites Vegetales Usados, buscando proteger el medio ambiente de la provincia. Asimismo, se realizaron modificaciones a la Ley XIV – N° 144 para mejorar su eficacia y adaptabilidad a las necesidades actuales.
Puerto Rico: nuevo motor industrial de Misiones
La ciudad de Puerto Rico, ubicada en el departamento General San Martín, ha sido oficialmente designada como la Capital Provincial de la Industria. Con esta declaración, se espera impulsar el desarrollo económico y fomentar la inversión en esta región, destacando su potencial como centro industrial clave en Misiones.
En sus fundamentos, el proyecto destaca que “desde su fundación, la ciudad de Puerto Rico ha sido un eje central para la industria maderera, agroindustrial y más recientemente, la manufacturera. La localidad cuenta con una rica tradición en la explotación forestal, que se remonta a la primera mitad del siglo XX. A lo largo de los años, la ciudad ha diversificado su economía, incorporando la producción de alimentos, muebles, papel y productos derivados de la madera, así como otros sectores industriales que han contribuido al crecimiento económico de la región”.
Además, señala que la ciudad posee una infraestructura adecuada para la industria con parques industriales, acceso a rutas nacionales y provinciales, puertos y centros logísticos regionales. A ello se le suma una red de servicios públicos eficientes que facilitan la instalación de distintas industrias.
En Puerto Rico existen 74 empresas que generan 400 puestos de trabajo directos. Otro punto importante es la cantidad de instituciones educativas y de formación técnica que forman recursos humanos altamente capacitados para sostener y expandir las actividades industriales.
Finalmente, el texto sentencia que la declaración de “Capital Provincial de la Industria” fortalecerá su posicionamiento dentro de la provincia y permitirá atraer inversiones adicionales, también facilitará el acceso a fondos y programas provinciales y nacionales destinados al desarrollo industrial.
Actualización de la Ley XIV – N° 144
La Legislatura modificó varios artículos de la Ley XVI N° 144 – Fitosanitarios y Domisanitarios de Saneamiento Ambiental, por ejemplo, el artículo 15 que queda de la siguiente manera: Entiéndase como aplicadores particulares, aquellos propietarios y/o locatarios que realicen el uso y/o la aplicación de productos contemplados por la Ley, de la siguiente forma: 1-En su propia industria 2- Utilizando equipos mecanizados y/o autopropulsados.
El artículo 27 queda de esta manera: El uso de productos regulados por esta ley, en cultivos extensivos, obliga al productor a investigar la presencia de residuos del producto aplicado y de sus metabolitos, en los recursos naturales involucrados para obtenerlas. Por vía reglamentaria se establecerá el procedimiento para cumplir con este requisito.
Por último, el artículo 47: es necesario establecer un plazo para eliminar los stocks de estos productos existentes en la provincia, así como habilitar particularmente productos que son imprescindibles para determinadas actividades productivas y que son prohibidos por el presente artículo.
Programa para la reutilización de aceites vegetales
En un esfuerzo por disminuir la contaminación ambiental, se implementó un Programa Provincial enfocado en la gestión y reutilización de aceites vegetales usados. Esta iniciativa busca reducir el impacto negativo en el agua y el suelo, promoviendo prácticas sostenibles que aseguren un entorno saludable para las futuras generaciones.
El Programa tiene los siguientes objetivos:
- Proteger el ambiente conforme lo previsto en el artículo 41 de la Constitución Nacional
- Instar a los municipios a implementar con participación pública y/o privada sistemas de recupero de AVUs provenientes tanto de la actividad industrial, comercial y domiciliaria para que los mismos tengan su disposición final en plantas autorizadas
- Proteger la infraestructura de saneamiento básico de los ejidos municipales
- Minimizar la generación de gases de efecto invernadero a partir de la producción de biocombustibles derivados de AVUs y del reemplazo parcial y paulatino de combustibles fósiles
- Concientizar y hacer participar a la población en la gestión ambiental adecuada de los AVUs y difundir los beneficios de la reutilización y su valorización
- Relevar experiencias locales públicas y/o privadas de recolección y reciclado de AVUs con el fin de detectar aquellas que puedan servir de guía a quienes comiencen su implementación
- Crear una base de datos sobre el reciclado de AVUs, a fin de contar con información fehaciente que permita determinar la utilización circular de estos aceites y el diseño de políticas públicas locales que disminuyan la contaminación ambiental
Se considera aceite vegetal y grasa de fritura usados (AVUs) a la materia que proviene o se producen a partir de la cocción o preparación mediante fritura total o parcial de alimentos.
Los fundamentos del proyecto sancionado indican que “en la mayoría de los municipios de la Provincia, los aceites vegetales usados son gestionados como cualquier residuo o los vecinos lo disponen en las cañerías, arrojando en la tierra o en los cursos de agua.
Esta disposición inadecuada ocasiona problemas, deterioro y obstrucción de tuberías y alcantarillado y de las Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales; afecta los cursos de agua, contamina el suelo; el aceite se adhiere a las paredes de las tuberías provocando obstrucciones y disminuyendo el caudal de evacuación del agua hasta bloquearlo y pudiendo causar inundaciones inclusive, asimismo, provoca la formación de una película superficial en aguas de ríos, lagos, etc., que afecta al intercambio de oxígeno y perjudica a los seres vivos de los ecosistemas”.
Además, este aceite usado puede ser revalorizado y reutilizado, se lo somete a un proceso y se pueden producir nuevos productos, como la producción de biocarburantes, jabones, ceras, barnices, por ejemplo, lo que permite impulsar actividades económicas y empleos más verdes.
Los beneficios que traería el tratamiento diferenciado de los AVUs son muchos: beneficiar la depuración de aguas residuales; disminuir costos de mantenimiento de redes cloacales y alcantarillado; menos contaminación en cursos de agua; generar fuentes alternativas de energía: la reutilización del residuo ACU como recurso energético, reduce la dependencia de los combustibles minerales y disminuye la huella de carbono en su uso en el transporte.