La Dirección General de Aduanas llevó a cabo la incautación de una mercancía valuada en 4,6 millones de pesos que un ciudadano argentino intentó ingresar al país desde Paraguay a través del paso fronterizo Posadas-Encarnación. En un minucioso operativo de control, los agentes de aduana detectaron a un individuo que llevaba 26 teléfonos iPhone adheridos a su cuerpo mediante una faja, mientras se encontraba a bordo de un autobús que se dirigía de Encarnación, Paraguay, a Posadas, Argentina, a través del Puente Internacional San Roque González de Santa Cruz.
Cuando los pasajeros descendieron del vehículo para la inspección de rutina por parte de la Aduana, el personal de dicho organismo notó a un hombre que parecía tranquilo, pero que llevaba una cantidad excesiva de abrigo para el clima de la zona en ese momento.
Al realizar las preguntas de rigor al individuo, este afirmó ser ciudadano argentino que regresaba al país tras un viaje de turismo. Sin embargo, durante la conversación, los agentes aduaneros notaron protuberancias rígidas en varias partes de su cuerpo.
Por lo tanto, se procedió a solicitar la presencia de las fuerzas de seguridad para una inspección más detallada. Finalmente, el hombre accedió voluntariamente a retirar cada uno de los paquetes que tenía adheridos a su cuerpo con una faja y los colocó sobre una mesa de control.
Dada la cantidad y diversidad de la mercancía, se sospecha que la intención del ciudadano argentino era comerciar con estos productos, lo que constituye una violación al artículo 977 del Código Aduanero.
En este contexto, la Aduana procedió al secuestro de los teléfonos, valorados en 4.675.978,40 pesos, y la multa por la infracción podría ascender a los 14.027.934 pesos.
El individuo quedó vinculado a una causa bajo la jurisdicción del Juzgado Federal de Posadas.