La Argentina está en recesión y la industria cayó en mayo y la esperanza de una recuperación en “V” da paso a un escenario de “L” en el que el rebote se hace esperar. Según estimaciones de la consultora OJF, la contracción interanual fue de casi 10% y acumula prácticamente un año de retroceso. El sector fue uno de los más afectados en la caída de 5,1% del PBI en el primer trimestre.
Mariano Boettner
La recuperación de la producción fabril, uno de los sectores más afectados durante la caída de 5,1% del PBI en el primer trimestre, se demora y los números más actualizados recopilados por el sector privado no registran un cambio de tendencia claro. Un informe de Orlando J. Ferreres mostró un desplome interanual industrial de 9,8% y de 1% mensual en mayo que confirma que la economía está lejos de rebotar en forma de “V” corta y, en cambio, se mueve en dirección a una temida “L” en la que el menor nivel de actividad se extiende en el tiempo.
La industria manufacturera fue uno de los sectores que tuvieron el impacto más pronunciado de la profundización de la recesión de los últimos meses. El promedio del Producto Bruto cayó 5,1% en los primeros tres meses de 2024, y el sector fabril tuvo el segundo derrumbe más elevado (13,7%), después de la construcción, de 19,7 por ciento.
Esos datos oficiales llegan hasta fines de marzo pero los números privados más allá de esa fecha de corte aún no son favorables para uno de los sectores decisivos para la actividad económica y el empleo. Ferreres midió en mayo una caída de casi dos dígitos medido de forma interanual -bajo este criterio ya acumula un año con cifras en rojo- y un retroceso de 1% en comparación con abril. La medición desestacionalizada mes contra mes permite, generalmente, observar si existe un cambio de tendencia mucho mejor que la interanual en momentos como el actual en los que la caída en comparación a un año ya es largamente conocida. Lo que buscan los especialistas en los datos intermensuales es el piso, que parece haber tenido lugar en marzo y, después de ello, la dinámica de un eventual rebote.
“La actividad industrial retrocedió en mayo, aunque no volvió a tocar el piso que había encontrado en marzo. Así, la serie desestacionalizada marcó una baja de 1,0% mensual, quedando 3,1% por debajo del nivel que tenía en diciembre. En la comparación anual, la caída fue de 9,8%, donde las mayores contracciones se produjeron en maquinaria y equipo (-23,8%), Minerales no metálicos (-25,8%), y metales básicos (-33,5%)”, indicó OJF. En los primeros cinco meses del año el balance es negativo: una contracción fabril de 9,2% en comparación con enero-mayo de 2023.
“Para los próximos meses anticipamos que continúe la oscilación de la actividad industrial en torno a los niveles bajos actuales. Esperamos que un eventual cambio de tendencia y comienzo de recuperación se produzca cuando la desaceleración de la inflación dé lugar a una mejora de los ingresos de las familias y a una recomposición de la demanda interna”, mencionó la consultora dirigida por Orlando Ferreres y cuyo director del centro de estudios económicos es Fausto Spotorno, uno de los miembros del consejo de asesores económicos del presidente Javier Milei.
Hace algunos días, la Fundación FIEL también había detectado una caída pronunciada interanual (10,9%, mayor a Ferreres) pero una recuperación de 1% mensual. En el tramo de los primeros cinco meses el desplome industrial fue de 11,2%, de acuerdo al informe de ese centro de estudios. La poca fuerza del re
“Para los próximos meses anticipamos que continúe la oscilación de la actividad industrial en torno a los niveles bajos actuales” (OJF)
“La industria registró en mayo una nueva caída en la comparación interanual, de menor magnitud a la observada en el bimestre previo, deteniendo el retroceso en el acumulado del año. En sectores industriales relevantes ‐del mismo modo que en abril‐, la caída de actividad volvió a ser inferior que en el mes previo”, planteó. “Si bien la industria habría detenido su caída, el freno de plantas y turnos durante la tercera semana de junio y el anticipo de nuevas paradas en julio en actividades puntuales, ralentizarán la recuperación cíclica de la industria”, anticipó FIEL.
Los datos de industria, así, exhiben que la recuperación de la economía será más lenta de lo que preanunciaba el Gobierno. La caída del PBI de 2,6% desestacionalizada (es decir, en comparación con el cuarto trimestre de 2023) fue más baja que lo esperado por las proyecciones previas del mercado: según el REM del Banco Central, en términos de PBI los bancos y consultoras esperaban una caída de 3 por ciento.
“Las políticas iniciales implementadas, como el realineamiento de precios relativos y el significativo ajuste cambiario de diciembre, buscaron corregir los desequilibrios macroeconómicos pero exacerbaron la inercia inflacionaria a comienzos de año. Esto puede explicar en gran medida la contracción económica observada durante el primer trimestre de 2024. Tanto desde el lado de la oferta como de la demanda se registran señales de contracción”, estimó la consultora ACM
“Hacia delante, anticipamos que la recuperación de la economía se podría postergar hacia fines de este año. Si la inflación mantiene la tendencia reciente, esperamos una mejora en los salarios reales en el último trimestre de este año, recuperando parcialmente lo observado en el consumo. Por su parte, los sectores orientados al mercado exterior continuaran morigerando la contracción observada en el mercado doméstico”, plantearon.
Balanz, tras el dato del Indec, detalló: “Por el lado de la demanda, sólo las exportaciones (11,1%) tuvieron un crecimiento trimestral. El consumo privado (-2,6%), consumo público (-0,8%) y la formación bruta de capital fijo (-12,6%) presentaron variaciones negativas en la comparación trimestral. En términos interanuales la formación bruta del capital retrocedió -23,4%, el consumo privado -6,7% y el consumo público -5%, mientras que las exportaciones avanzaron 26,1% en este mismo plazo”, estimaron.
“En términos históricos, la contracción del primer trimestre es significativa comparada con el mismo periodo en los últimos 20 años, siendo únicamente superado en el primer trimestre de 2009 y 2019″, dijo por otra parte ACM. El Gobierno y el Fondo Monetario trabajan, desde la última negociación técnica, con un escenario de base de una caída del PBI este año de 3,5%, unos 0,75 puntos porcentuales más graves que hace un trimestre. El mercado -medido a través del REM- espera un desplome algo mayor, de 3,8 por ciento.
La caída de la actividad, sector por sector
El reporte de OJF muestra que en el desagregado sector por sector de la industria, hay pocas buenas noticias. Como detalla en su informe, de la siguiente manera:
Alimentos, Bebidas y Tabaco: este sector registró durante el quinto mes un avance de 0,3%, en donde el único rubro impulsando el crecimiento fue el oleaginoso (+10,4%), mientras que tanto la faena bovina (-9,3%), como la elaboración de bebidas (-8,1%) y tabaco (-11,3%) mostraron caídas anuales. En conjunto, el sector acumula para los primeros cinco meses una suba de 0,8 por ciento.
Maquinaria y Equipo: la producción de maquinaria y equipos anotó para mayo una caída de 23,8%, acumulando para los cinco meses en análisis una merma de 21,8 por ciento. En el detalle de la producción automotriz, ADEFA informó un total de 38.440 unidades nuevas, marcando una baja de 27,9% en la comparación anual.
Metales básicos: la manufactura de metales básicos fue el sector más contractivo en mayo, observando una caída de 33,6 por ciento. Entre las principales líneas, la baja más importante fue la de acero crudo, con una producción 51,8% menor a la de hace un año. También se destaca la contracción de 40,9% en la elaboración de laminados terminados en caliente, y de 21,2% en los terminados en frío.
Minerales no metálicos: el sector de insumos para la construcción anotó en mayo una caída de 26,8%, logrando por segundo mes mostrar una desaceleración en la tasa anual (-42,9% en marzo y -35,6% en abril). Así, esta actividad anotó para los cinco meses transcurridos una baja de 30,1 por ciento. En detalle, la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland reportó para el quinto mes una caída de 27,1% en la producción de este insumo.
Pareto y las curvas convexas: qué dijeron los economistas sobre el discurso con el que Milei aseguró estar reescribiendo la teoría económica
En su discurso ofrecido ayer en Praga, el Presidente sugirió que podría ser candidato al Premio Nobel de Economía. Algunos de sus colegas criticaron sus afirmaciones, en especial por contradecir a la Escuela Austríaca a la que adhiere el primer mandatario
Javier Milei en República Checa
Las palabras del presidente Javier Milei en Praga, en las que consideró que estaba “reescribiendo gran parte de la teoría económica” con su gestión lo que podría volverlo un candidato a recibir el Premio Nobel de Economía junto a su jefe de asesores, Demian Reidel, dispararon múltiples análisis y comentarios entre los economistas. Y no faltaron críticas de diversa índole. Más allá de la conveniencia de estar haciendo disertaciones en el exterior sobre cuestiones extremadamente técnicas y teóricas mientras en el país se discuten tópicos más urgentes y concretos, varios de sus colegas reprocharon a Milei haberse corrido del paradigma de la escuela austríaca, un alineamiento del cual el Presidente suele enorgullecerse.
Tras recibir el premio del Instituto Liberal de República Checa “por contribuir a la proliferación del pensamiento liberal y hacer realidad las ideas de la libertad, propiedad privada, competencia y Estado de derecho”, Milei trazó un análisis en el que se refirió a cómo cada empresa, con la idea de la “destrucción creativa”, crea su propio monopolio y está todo el tiempo tratando de capturar rendimientos crecientes, hacer innovaciones y se genera el mencionado proceso de “destrucción creativa”, que es lo que permite ver el fuerte crecimiento.
“Este tipo de cuestiones son importantes, medulares, a punto tal que con mi jefe de asesores, el doctor Demian Reidel, estamos reescribiendo gran parte de la teoría económica para poder derivar optimalidad de Pareto, tanto estático como intertemporal, teniendo funciones de producción no convexas”, explicó Milei en el Palacio Zofín durante la ceremonia. Además, agregó: “Es decir que si me termina de salir bien, probablemente me den el Nobel de Economía junto a Demian. Eso es parte de otra historia, porque desaparecería el conflicto entre la fábrica de alfileres y la mano invisible.”
El Óptimo de Pareto es un concepto económico basado en criterios de utilidad. Así, en términos microeconómicos, es cuando alguien o algo no puede mejorar su situación sin perjudicar a otro. Ese punto óptimo es lo que se conoce en la economía como el Óptimo, o eficiencia u optimalidad, de Pareto. Pero hay economistas que destacan que no tiene lugar en el marco teórico que abraza el Presidente.
“Me llama la atención cuando Milei mezcla la mano invisible con los alfileres de Adam Smith. Me parece que el estrés de la presidencia le está afectando” (Roberto Cachanosky)
“Cuando menciona a Pareto habla de dinámica y estática, pero para la Escuela Austríaca, a la que dice pertenecer, el análisis de Pareto puede ser nada más que estático, nunca dinámico. Y después otra cosa que me llama la atención es cuando mezcla la mano invisible con los alfileres de Adam Smith. Cuando habla de la fábrica de alfileres Smith lo hace en referencia a la división del trabajo y después, cuando se refiere a la mano invisible, hace su famosa cita en la que dice que no espera de la benevolencia del cervecero, del carnicero y del panadero para la cena de esta noche, sino el interés de éstos que le venden esos productos porque lo necesitan. No es por benevolencia, es por trabajo, por interés. No sé por qué mezcla las dos cosas, me parece que el estrés de la presidencia le está afectando”, dijo el economista Roberto Cachanosky.
En tren de simplificar una cuestión extremadamente compleja y técnica, Cachanosky señaló: “El Óptimo de Pareto dice que se puede mejorar la situación de una persona sin perjudicar a otra, siempre dada una determinada cantidad de recursos. Una vez alcanzada esa situación, cualquier cambio perjudica a otra persona. ¿Qué dice la escuela austríaca de economía? Que en la vida real no es posible conocer todas las preferencias individuales ni calcular de manera centralizada una asignación óptima de recursos, porque la gente valora los bienes de diferente manera y, además, esa valoración cambia”.
En la misma línea, el economista Diego Giacomini, quien en el pasado fue coautor de un libro con el Presidente y su principal socio intelectual, aseguró que los comentarios de Milei se alejan del marco teórico al que siempre refiere: “Es increíble que un economista que dice adherir a la escuela austríaca investigue sobre el Óptimo de Pareto. El paradigma de la escuela austríaca concibe la economía como un fenómeno dinámico, de cambios permanentes, en la que el tiempo es la variable crucial. Para esa posición, el Óptimo de Pareto no existe porque solo puede darse en otro marco teórico, el de la economía neoclásica”.
Sin ahorrar ironía, Giacomini también opinó sobre la referencia de Milei al Premio Nobel: “No me sorprendería que Milei fuese un candidato al Premio Nobel, ya que uno de los últimos ganadores fue Ben Bernanke, que en la Reserva Federal de EEUU implementó las recomendaciones de Milton Friedman después de la crisis de Lehman Brothers. Eso no fue otra cosa que una expansión brutal de la base monetaria y una manipulación de las tasas de interés que las dejó en un nivel negativo en términos reales. Es justamente lo que está haciendo Milei”.
Esas medidas “están en las antípodas de la escuela austríaca, ya que lo que hace es amplificar el ciclo de ‘boom & boost’, que trae emisión monetaria artificial y creación de crédito irreal que luego da lugar a crisis endógenas deflacionarias”
“Es increíble que un economista que dice adherir a la escuela austríaca investigue sobre el Óptimo de Pareto. Para esa posición, el Óptimo de Pareto no existe porque solo puede darse en otro marco teórico, el de la economía neoclásica” (Giacomini)
Otras opiniones fueron aún más críticas. “Milei nunca escribió nada académico original y ahora avisa que va a reescribir la ciencia económica, y al nivel del premio Nobel. Está simplemente divagando. No merece más comentarios”, dijo Carlos Rodríguez, ex asesor del Presidente durante la campaña presidencial del año pasado y uno de sus mayores críticos por estas horas.
“Hablo de Pareto y de las curvas convexas, cuestiones muy técnicas de las que no dio detalles de cómo las aplicaría. Dijo que podría ganar el Nobel con Reidel, con quien aseguró estar reescribiendo gran parte de la teoría económica. La verdad, no se sabe qué es lo que están haciendo en ese sentido. Hasta ahora no hay nada que no sea un ajuste clásico que aún no sabemos su real alcance y tampoco cómo va a terminar”, destacó un economista ortodoxo que pidió anonimato. “Me parece que la gente lo votó para que gane la batalla contra la inflación, no el Premio Nobel”, dijo, en la misma línea, un colega de la otra vereda del pensamiento económico, que tampoco quiso explayarse ni participar del debate.
“El profesor de Microeconomía II no advierte que precisamente si las funciones no son convexas y tenés especialización inframarginal todo el edificio austríaco se desmorona”, tuiteó Eduardo Crespo, doctor en Economía y profesor de la Universidad Federal de Rio de Janeiro y de la Universidad Nacional de Moreno (UNM).
Y luego amplió: “Si los retornos son siempre marginalmente decrecientes (como en la típica micro marginalista), la especialización no tiene sentido. Sin embargo, como argumentaba Adam Smith (erróneamente asociado a veces con el marginalismo), la especialización suele ser muy ventajosa. No es una paradoja cuya resolución merezca el Nobel como piensa Milei, simplemente el marginalismo y las curvas convexas no son generales”.
“Es increíble que sigan defendiendo como algo totalmente general un enfoque incompatible con la fábrica de alfileres o peor, que puedan imaginar que algo compatible pueda merecer un Nobel, en fin”, afirmó Crespo, haciendo alusión a la metáfora de Adam Smith.
Crespo opinó además sobre las razones por las que Milei se mete de lleno con debates teóricos. “Es increíble que un Presidente se dedique a hablar de estos asuntos”, señaló.
En ese mismo sentido, Giacomini se preguntó: “¿Qué hace Milei haciendo mala investigación de teoría económica si le pagamos entre todos para que esté en la Argentina y se dedique a gestionar su gobierno? Por otra parte, cualquiera que haya hecho un posgrado en alguna universidad de relevancia internacional sabe que no hay investigación seria si no estás dedicado cien por ciento a ello”.
Fuente: Infobae