Según la información brindada por el fiscal a cargo, René Bosio, el hombre utilizó una escopeta y una pistola calibre 9 milímetros para asesinar a su pareja, quien se encontraba en proceso de separación del agresor. La discusión entre ambos terminó en un episodio de violencia extrema, que los menores presenciaron. Desesperados, los niños salieron en busca de ayuda y lograron encontrar a un gendarme que pasaba por la zona. Sin embargo, cuando regresaron al hogar acompañados del soldado, ya era demasiado tarde: ambos estaban muertos.
En el lugar, la Policía encontró 10 armas de fuego y municiones, dado que el agresor era instructor de tiro. Las autoridades ordenaron las pericias correspondientes y el traslado de los cuerpos a la morgue judicial para realizar las autopsias.
Este caso de femicidio resalta la violencia doméstica que afecta a muchas familias y subraya la importancia de tomar medidas ante situaciones de riesgo. En casos de violencia por motivos de género, se recomienda contactar la línea nacional gratuita 144 para recibir contención e información. En situaciones de emergencia, se debe llamar al 911.