Los residentes de salud de la provincia continúan su paro en demanda de una mejora salarial que supere el 22% propuesto por el Ministerio de Salud Pública para febrero. La medida de fuerza cuenta con la adhesión total de los 367 residentes médicos, enfermeros, bioquímicos, kinesiólogos, farmacéuticos, trabajadores sociales y psicólogos en los siete hospitales escuelas de la provincia.
Según el subsecretario de Recursos Humanos de Salud Pública, Rodolfo Fernández Sosa, la medida de fuerza tomó por sorpresa a las autoridades, ya que no se habían presentado conflictos con este sector en los últimos dos años. Fernández Sosa explicó que los haberes de los residentes se actualizan automáticamente con los aumentos de haberes de Salud Pública, y que no hay posibilidad de mejorar la propuesta salarial actual.
Los residentes, por su parte, argumentan que el aumento del 22% propuesto no equipara lo perdido por la inflación, que ha sido del 67,2% desde octubre hasta enero. Ante esta situación, algunos residentes se ven obligados a realizar guardias extras en el sector privado o en Centros de Atención Primaria de la Salud para poder subsistir con los gastos básicos.
En una carta abierta a la comunidad, los residentes expresaron su situación y la importancia de contar con un sueldo digno que les permita continuar su formación y sostener a sus familias.
“Somos médicos recibidos que continuamos nuestra formación para el día de mañana ser llamados médicos especialistas. Médicos especialistas que adquieren herramientas y habilidades para aliviar el sufrimiento de muchas personas. Muchas veces somos nosotros quienes redactamos tu historia clínica, quienes llevamos muestras al laboratorio y esperamos el resultado en la puerta, y que también muchas veces no dormimos al lado de la cama del paciente sin que este se entere. Somos médicos que desde pequeños soñamos con serlo, pero que hoy nos toca sentirnos precarizados y también maltratados por el sistema de salud al cual pertenecemos, ya que a muchos nos toca sostener a nuestras familias con el trabajo que realizamos, por lo que pedimos un sueldo digno que nos permita continuar nuestra formación, porque no conocemos otra manera de ganarnos lo nuestro que no sea trabajando por la salud de todos nuestros pacientes”.