Ramón «Toto» Silva lucha por su vida conectado a un respirador artificial en el Hospital Ramón Madariaga de Posadas, luego de haber sufrido quemaduras graves al incendiar un colchón en su celda de aislamiento en la Unidad Penitenciaria VII de Puerto Rico.
El incidente ocurrió el martes pasado, cuando Silva, quien cumple una condena por homicidio, prendió fuego al colchón como forma de protesta en la prisión. Las quemaduras resultantes lo dejaron en estado crítico, especialmente afectando sus vías respiratorias por la inhalación de monóxido de carbono.
El hombre, condenado a once años de prisión por matar a golpes de piedra a su vecino en 2020, había sido encerrado en la celda de aislamiento debido a su comportamiento violento en los días previos.
El crimen por el cual fue condenado ocurrió en el barrio Ñanderoga de Ruiz de Montoya, donde atacó brutalmente a su vecino por celos, golpeándolo con piedras hasta causarle la muerte.
Las circunstancias en torno al incendio en la celda de aislamiento han despertado preocupación e interrogantes. No se ha realizado una investigación exhaustiva sobre el incidente, y no se ha dado intervención a la Policía Científica para analizar la escena.
Además, se ha destacado que la UP-VII no está equipada con celdas de aislamiento, lo que sugiere que las instalaciones fueron adaptadas para este propósito de manera improvisada. También se señala que los detenidos en aislamiento no deberían tener acceso a elementos como encendedores.