Luego de que el empresario Santiago Pissani (55), le propinara una golpiza a un joven delivery por demorar en la entrega de una pizza, un grupo de trabajadores se concentraron frente al local de uniformes para protestar.
La concentración causó el corte de la avenida Uruguay.
Pidieron la captura federal de Pissani
La Policía allanó ayer el local del comerciante posadeño, ubicado sobre la calle Barrufaldi, pero no logró ubicarlo.
En este contexto, el juez de Instrucción N° 2 de Posadas, Juan Manuel Monte, informó que la orden de detención de Santiago Pissani se amplió a las fuerzas federales.
Propietario de Uniformes Pissani, una tienda de ropa que confecciona prendas personalizadas, el empresario de 55 años es actualmente competidor y organizador de torneos de lucha libre en Posadas y en la región. El hombre lleva años como practicante de esta clase de deportes y tiempo atrás se había consagrado como campeón en judo, artes marciales mixtas y lucha grecorromana.
A raíz de la difusión del material fílmico donde se observa al agresor encima de su víctima y de la denuncia realizada, el juez Monte inició una investigación para determinar las circunstancias del ataque y pidió la detención del agresor, que sería llamado a declarar próximamente. En el marco de dicho proceso, se informó que el sospechoso tiene antecedentes comprobables al de la madrugada del martes, los cuales lo llevaron a estar privado de la libertad en reiteradas ocasiones.
Cabe recordar que en la madrugada de este martes, un moto delivery de 23 años fue agredido por el comerciante posadeño, quien se molestó por la tardanza del envío. El agresor es campeón de judo y de lucha grecorromana.
El hecho se violencia se registró en el domicilio de la calle Barrufaldi de la capital provincial, donde fue agredido un joven repartidor de pizzas identificado como Sebastián Osvaldo L., de 23 años.
Según relató la víctima a la policía, Santiago Pissani (55), domiciliado en el mismo lugar, le solicitó dos pizzas para su domicilio a través del local “Wep”, donde trabaja el damnificado.
Al llegar al lugar, el acusado se negó a pagar una de las pizzas, argumentando que el delivery había llegado tarde. Luego, al intentar quitarle el casco, lo lesionó en el cuello con la correa del mismo, para luego propinarle golpes de puño en el rostro, causándole lesiones en el ojo y pómulo izquierdo.
La víctima, al intentar escapar, vio caer un cuchillo tipo serrucho que aparentemente llevaba consigo el denunciado, lo cual fue incautado por la Policía en el lugar de los hechos.
Además, el hombre le habría proferido amenazas de muerte antes de retirarse del lugar. “Me llegas a escrachar, te voy a buscar y te voy a reventar todo”.
