El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) ha implementado cambios significativos en las regulaciones que rodean la venta minorista de pollitos bebés en la provincia de Misiones. Esta actualización en las normativas marca un retorno al movimiento comercial prepandémico que permitía la entrada de entre 7,000 y 14,000 pollitos en el mercado local.
La resolución 959, publicada recientemente en la página oficial del Senasa y que entrará en vigencia después de su aparición en el Boletín Oficial, mantiene la prohibición de concentración de aves domésticas, como gallinas, gallos, pollos, pavos, gallinetas, faisanes, codornices, patos y gansos en ferias y eventos.
Estos cambios responden a la evolución de la situación sanitaria en el país en relación con la influenza aviar y a la información científica disponible. La normativa, firmada por la titular del Senasa, Diana Guillen, establece medidas específicas para garantizar la bioseguridad en la producción y venta de pollitos.
Una de las actualizaciones clave es la eliminación de la prohibición de la venta minorista, aunque con limitaciones. La venta minorista solo se permitirá a través de la Asociación de Productores de la Feria Franca y con un límite máximo de 100 pollitos al mes por productor. Esto busca abastecer el mercado interno de la provincia y reducir el contrabando de aves, que se ha denunciado en múltiples ocasiones.
A pesar de estos cambios, la trazabilidad y la bioseguridad siguen siendo fundamentales. Todos los pollitos deberán contar con el Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios (Renspa) y una habilitación del Senasa. Además, las aves serán transportadas con guías de transporte desde la avícola hasta las agropecuarias, que funcionarán como terminales de autogestión para mantener la trazabilidad, un requisito importante para los organismos internacionales que compran carne de pollo argentina.
Estos cambios son un resultado directo del brote de Influenza Aviar Altamente Patógena (IAAP) que afectó a las aves de corral en el país y las acciones sanitarias que se llevaron a cabo en respuesta. El Senasa presentó una autodeclaración ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) afirmando que Argentina es un país libre de esta enfermedad. Estas medidas buscan equilibrar la necesidad de mantener la bioseguridad con la demanda del mercado de pollitos en la provincia de Misiones.
