Pissani sigue prófugo aunque se entregaría en las próximas horas. Sobre el empresario y exluchador pesa una orden de detención por golpear a un motodelivery. Hubo allanamientos pero no dieron con él. Qué dijeron la víctima y el agresor en las últimas horas.
El lunes por la noche las redes sociales se hicieron eco de una denuncia por Facebook cuando un motodelivery fue grabado por un vecino siendo brutalmente golpeado por el empresario textil posadeño Santiago Pissani.
Según lo que se pudo saber en las últimas horas de este miércoles, el hombre -también conocido por ser un deportista especializado en lucha grecorromana- no está detenido y recién se pondría a disposición de la justicia este jueves, luego de las reuniones con su abogado.
Durante la jornada de hoy la Policía procedió a buscarlo en su negocio de ropa textil “Uniformes Pissani” así como también en su domicilio por calle Barrufaldi, pero en ambos lugares se recibió una respuesta negativa: no se encontraba.
La voz del motodelivery: “Tengo miedo”
Esta tarde el joven de 23 años agredido, Sebastián Lafuente, se expresó en el canal nacional Todo Noticias para dar su versión de los hechos y alertó: “Tengo miedo de que este tipo me haga algo, tengo miedo por mí y por mi familia”
Agregó que “esa misma noche hice la denuncia pero este señor nunca se presentó para hacer ningún tipo de declaración, en ese momento se me cruzó por la cabeza que era mi último día de trabajo“.
Al ser consultado sobre la cronología de los hechos, contó que Pissani “entró a su casa y volvió a salir, me tiró al piso y me decía ‘soy campeón de artes marciales, no sabés con quién te metés, te voy a recagar a palos, callate la boca, no sabes con quién te metes’ “.
“Cuando me levanto agarro la moto y le digo ‘mirá lo que me haces por dos pizzas, no te cuesta nada reclamar a la pizzería’. Luego, voy a la esquina y llamo a la policía, tardan 5 minutos en llegar”.
“Luego, van a su domicilio y él les dice que no tenía ningún problema personal conmigo y que me pegó porque las pizzas llegaron frías, la pizzería no quedaba lejos de su domicilio pero esa noche saqué muchos pedidos, tardé menos de 15 minutos en llegar a su domicilio, las pizzas no estaban frías, estaban a temperatura ambiente”, describió.
La versión de Pissani
Santiago Pissani también dio su versión de los acontecimientos, en este caso en Red Ciudadana de Posadas, donde minimizó la situación: “Cuando vino el muchacho le dije ‘mirá flaco, está todo bien’ estuve mal porque le tiré la pizza al piso, la levanté y le di en la mano, le dije ‘llevales la pizza y deciles que eso no se hace’, me hicieron esperar dos horas y me traen la pizza fría, me dijo ‘no, esperá que me van a descontar a mí’, yo le dije que le lleve, que si le descontaban la pizza que yo a él le daba la plata al otro día. Mi bronca era con la pizzería porque mandó tarde y que el pibe no tenga ni un problema”.
Sin embargo, según su relato, “el pibe se enoja, empezó a filmar, le empujo y le digo ‘andate’, se baja y me dice ‘te voy a cagar a trompadas ‘me mete una patada y, en defensa, lo tiro al piso, me subo encima y no se calmaba, lo toqué un poco, no le pegué, le estaba palmeando, le hablé bien y le dije ‘escuchá te voy a soltar, vos te vas a subir a tu moto y te vas a ir’, más o menos fue eso, el chico empezó a los gritos, lo suelto, lo palmeo, se levanta y se va”.
“No lo lastimé, si él no está desfigurado es porque yo no quise, porque yo estando arriba de él en el piso hago lo que quiero, o sea, nadie se me va a escapar del piso y si no está lastimado es porque yo no quise lastimarlo”.
Versiones cruzadas: el cuchillo
Sebastián Lafuente declaró esta tarde en TN que “me amenazó con un cuchillo pero por suerte no me hizo nada, después vino la Policía, llegó un compañero mío y salió de testigo de que la policía secuestró el arma blanca con la que me amenazó”.
Entretanto, Santiago Pissani aseguró que “yo no ando con cuchillo por la vida, no sé de dónde sacó eso, aparte, o sea, yo le pegué un empujón, qué tiene que ver el cuchillo, no sé de dónde sacó que hay un cuchillo, ¿para qué voy a salir con un cuchillo contra un repartidor de pizza? No soy idiota, yo no necesito un cuchillo”.