En el entorno del presidente afirmaron que ya se evalúa la continuidad del aislamiento. Resta definir si la Ciudad volverá atrás con algunas de sus flexibilizaciones
Es casi un hecho. Entre el viernes y el sábado, el Gobierno comunicará la extensión de la cuarentena para contener el coronavirus por 2 semanas, hasta el 8 de junio. «Vamos a seguir haciendo la cuarentena porque está visto que es lo que tenemos que hacer. A nosotros nos preocupa el cuidado de la gente tanto como la productividad y el desarrollo de la economía argentina», sostuvo el presidente Alberto Fernández durante su visita matutina a la planta de Volkswagen en el partido de Tigre.
Ya por la noche, en el entorno del Presidente afirmaban que ya «se evaluaba» la extensión de la cuarentena hasta el 8 de junio. Y dejaban en claro que el Ejecutivo no piensa por ahora en comenzar la fase de desescalamiento de las restricciones, como ocurre en España e Italia.
La incógnita pasa por saber cómo se seguirá el aislamiento en el área metropolitana de Buenos Aire (AMBA), principal foco infeccioso. El Presidente espera los números del jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta. «Toda la mesa de expertos y técnicos de salud están analizando en estos días el comportamiento de la curva para después sugerirle a Horacio los pasos a seguir y este seguramente lleve todo eso a reunión con Nación y Provincia para ver pasos a tomar», explicaron en la jefatura de Gobierno a Clarín. Y en cuanto a la fecha del 8 de junio dijeron que sería «lógico por la cantidad de casos de las últimas horas».
En la Ciudad esperan el pico de contagios para dentro de dos semanas. Este martes, se registró el récord de infectados: 438 casos en todo el país. Larreta analiza dar marcha atrás con las salidas recreativas para chicos y con algunas excepciones; pero primero quiere tener los números que reflejen la incidencia de la relajación de la cuarentena que avaló el Presidente.
El gobernador Axel Kicillof, en cambio, recién acaba de autorizar las actividades de comercio que tenía «pisadas» después de varios días de tensión con el jefe de Gobierno. Los tres niveles de Gobierno se concentran ahora en los barrios populares, los más comprometidos del AMBA. Kicillof pidió seguir con el aislamiento.
Córdoba Capital y localidades de Río Negro, entre otras, decidieron dar marcha atrás con muchas de las excepciones que habían habilitado, incluidas las salidas recreativas.
El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, descartó la posibilidad de cerrar «el límite» con Buenos Aires, aunque sí lo hizo con Chaco, una de las provincias más comprometidas con la pandemia. «Buenos Aires y Santa Fe tienen un fuerte vínculo económico”, diferenció Perotti. Advirtió que quienes regresen de otras provincias deberán hacer dos semanas de cuarentena. En las últimas horas en Rosario se registró un caso positivo después de semanas. El infectado habría tenido contacto con una persona que viajó a la Ciudad.
Antes de tomar la decisión; el Presidente volverá a mantener una ronda de consultas con infectólogos y con gobernadores. «Si todos vamos a tener ese resultado económico, debemos privilegiar la vida de la gente. Es eso lo que hemos hecho y es eso lo que vamos a seguir haciendo. No porque, como algún tonto repite, nos enamoramos de la cuarentena. Vamos a seguir haciendo eso porque está visto que es lo que debemos hacer. Nos preocupa el cuidado de la gente tanto como la productividad y el desarrollo de la economía argentina”, había asegurado por la mañana.
Fuente clarín