Los detenidos, que viajaban con sus dos hijos menores de 1 y 5 años en una Ford Eco Sport Titanium, fueron interceptados durante un control de rutina. A pesar de que en un primer momento no se detectó nada sospechoso, al revisar la parte trasera del vehículo, los efectivos hallaron varios paquetes rectangulares ocultos en las ranuras de las puertas. Estos paquetes contenían los celulares, todos en sus cajas originales, pero sin la documentación correspondiente que avalara su legalidad.
El juez federal de Reconquista, Aldo Mario Alurralde, ordenó el secuestro de los dispositivos y del vehículo, así como del celular personal del conductor para su peritaje. La pareja quedó a disposición de la justicia y enfrenta cargos por contrabando.