Las reservas brutas del Banco Central cayeron más de 11 mil millones de dólares desde el último desembolso del FMI, que fue algo menor a esa cifra. Pago de deuda pública, venta de dólares del Tesoro y depreciación del yuan son los tres principales motivos. El otro dato a seguir de cerca son las «reservas netas», es decir, los dólares contantes y sonantes con que cuenta en realidad el Banco Central.
Las reservas del BCRA tocaron los U$S 65.595 millones. Tras el desembolso del FMI (por 10.835 millones de dólares) en abril pasado, llegaron récord de U$S 77.478 millones. Desde entonces las reservas se redujeron en U$S 11.883 millones.
La baja tan veloz de las reservas brutas se explica fundamentalmente por tres motivos:
1) Los pagos de deuda. A acreedores privados: Bonar 2019 por 2.836 millones de dólares, Bonar 2024 por 2.270 millones de dólares y Bonar 20, Bonar 37 y Birad por 890 millones de dólares. A organismos internacionales, en especial al Club de París, préstamo que se empezó a pagar tras la renegociación de 2014 realizada por el ex-Ministro de Economía Axel Kicillof. Al Club de Paris se realizaron dos pagos 559 y 850 millones de dólares (los días 23 y 24 de mayo). También pesan los vencimientos de deuda de corto plazo (Letes en dólares) que no pudieron refinanciarse, y entonces se pagaron con las reservas.
2) El acumulado de las ventas de U$S 60 millones diarios del préstamo del FMI al Tesoro para equilibrar al mercado cambiario. Por este concepto, las ventas ya suman 1.800 millones de dólares en 30 días hábiles.
3) El BCRA incluye el swap de monedas con China en sus reservas (hoy representa el 30% de total) por lo que la devaluación del yuan (frente al dólar) generó una caída contable de las reservas, ya que los yuanes se valúan en dólares.
Como es sabido, el FMI autorizó al Banco Central a intervenir en el mercado cambiario vendiendo dólares si es necesario dentro de la llamada “zona de no intervención” para estabilizar la cotización. Pero el Central no utilizó hasta ahora esta herramienta. Es decir que hasta ahora no hubo ventas de reservas por parte del BCRA para controlar al dólar.
Ahora bien, si el Central quisiera intervenir en el mercado cambiario el dato a monitorear no es el de las reservas brutas sino las «reservas netas o disponibles». Para ello hay que descontar los siguientes ítems (ver gráfico):
— La parte de los depósitos en dólares en el sistema financiero que forman parte del “encaje bancario” y se contabilizan como reservas: U$S 15.800 millones.
— El swap de monedas con China: U$S 19.605 millones.
— Los préstamos de corto plazo otorgados por el Banco Internacional de Basilea (BIS): U$S 2.500 millones.
— Los desembolsos que el FMI realizó con destino específico para “fortalecer las reservas internacionales” (casi U$S 7.270 millones) y para pagar deuda (solo quedan U$S 3.366 millones).
— Descontando todos esos ítems, las “reservas netas” del BCRA ese número asciende (al 24/05 ) a unos U$S 15.428 millones.
En mayo de 2018 las «reservas netas» ascendían a a 24.124 millones de dólares. Es decir, que las reservas disponibles son 8.700 millones menores, un tercio menos, que hace 12 meses. Esos U$S 15.428 millones son el verdero «poder de fuego» del Banco Central para enfrentar una eventual dolarización de depósitos en pesos, es decir, una corrida contra el peso. Fuente: PlanM.