Gustavo Melgarejo, delegado de UTICRA, habló sobre la situación de retiros voluntarios en la fábrica de zapatillas Dass. El hecho de bajas se atribuye “al temor de los trabajadores por futuro después de las elecciones”.
Cabe destacar que hasta la fecha no ha habido despidos dentro de la empresa, ya que como está acordado con el Ministerio de Trabajo de la Nación, no puede haberlos al menos hasta el 31 de noviembre. No obstante, Melgarejo indicó que se han efectuado 4 bajas en forma de retiro voluntario.
“Ha habido bajas dentro de la empresa, pero son retiros voluntarios, donde los compañeros van, se inscriben, cobran su indemnización y no hay ningún tipo de presión por parte de la empresa para que tomen esta decisión”, detalló.
Hasta la fecha, no ha habido despidos, ya que está acordado con el Ministerio de Trabajo de la Nación que no puede haber despidos hasta el 21 de noviembre. Sin embargo, se han observado bajas en la empresa, todas en forma de retiros voluntarios. El delegado gremial señaló que el trabajador que quiera hacer su retiro lo puede hacer a través del cuerpo de delegados que se encargan de esa tarea en la fábrica. Una vez que se inscriben, cobran su indemnización, ya están desvinculados de la empresa.
Melgarejo explicó que por el momento son 4 las personas que decidieron retirarse voluntariamente. “Algunos porque contaban con ofertas laborales y otros por la especulación o temor propio. Hay mucha incertidumbre a nivel nacional dependiendo de quién sea presidente y las declaraciones de cada uno”, aseveró. Asimismo, aseguró que la idea no es que los trabajadores hagan el retiro, sino que “se trata de mantener la mayor cantidad posible”.
De acuerdo a lo establecido, el próximo 22 de noviembre se estableció una audiencia con el Ministro de Producción de la Nación, la cual sirve de “mecanismo para evitar cualquier tipo de despidos a futuro”, a causa de la situación política y económica del país.
Melgarejo explicó que la decisión de retiro de sus compañeros “es extraña, pero es un temor que se siente”. Cabe recordar que la empresa Dass había sufrido una situación de incertidumbre similar en 2019, cuando la fábrica ya tenía fecha de cierre y “se decía que si la empresa presentaba quiebra no se cobraba la indemnización”.
“Recibimos varios mensajes de compañeros que decían ‘no sé qué hacer, no sé si me anoto para irme, no quiero perder mi indemnización’. No puedo garantizar lo que pueda llegar a pasar con un próximo gobierno, pero sí puedo decir que vamos a luchar hasta lo último para no perder nuestros derechos”, manifestó Melgarejo.