Dando cumplimiento a un oficio del juez federal de Oberá, José Luis Casals, efectivos de la Policía Federal (PF) detuvieron ayer a un oficial de Gendarmería Nacional en el marco de la investigación de una causa por presunta “comercialización y facilitación de estupefacientes”. Ante la consulta de El Territorio, fuentes del caso identificaron al detenido como Matías M. (22), subalferez con prestación de servicios en el Escuadrón 9 Oberá de GN.
Precisamente, ayer por la mañana el oficial fue citado por la superioridad a dicha dependencia, donde fue notificado de la orden judicial y quedó detenido e incomunicado. Por la tarde fue trasladado a la sede de Policía Federal en la capital de la provincia. En los próximos días sería citado a indagatoria. El detenido es oriundo de la provincia de Buenos Aires, pero años atrás vivió en Oberá cuando llegó con su familia, puesto que su padre fue jefe del Escuadrón 9 a partir del 2002, recordaron desde la propia institución. Actualmente el progenitor está retirado de la fuerza.
A pesar de su juventud, el ahora detenido ya prestó servicios en Puerto Iguazú y El Soberbio, donde estuvo encargado de la unidad y desde donde fue trasladado hace pocas semanas. La causa en marcha tendría relación con su accionar en El Soberbio, aunque al cierre de esta edición no había mayores datos al respecto y las pesquisas se manejaban con sumo hermetismo.
Tras la detención, efectivos de la Federal allanaron el domicilio donde residía el subalferez. Al respecto, si bien sus padres son propietarios de una vivienda en Oberá, actualmente está alquilada, por lo que desde que se mudó a esta ciudad el sospechoso vivía en casa de amigos. El procedimiento de la víspera generó un enorme revuelo en el ámbito del Escuadrón 9.
En tal sentido, algunas voces recordaron el allanamiento de la dependencia en septiembre del 2017 por orden del juez federal de Concepción del Uruguay, Pablo Seró, en el marco de una investigación por narcotráfico. Asimismo, desde la propia fuerza hicieron trascender ciertas suspicacias sobre el nivel de vida que tenía el ahora detenido, aficionado a los autos, cuatriciclos y picadas, tal como lo evidencia en las redes sociales.