Un colectivo argentino que realizaba la ruta Camboriú-Posadas fue detenido por la Policía Rodoviaria Federal (PRF) en Brasil, tras constatarse que acumulaba 54 infracciones de tránsito en el último año, la mayoría por exceso de velocidad. La empresa propietaria del vehículo tuvo que abonar una multa de 7.000 reales, equivalente a 1,2 millones de pesos argentinos, para que el ómnibus pudiera continuar su trayecto.
La detención ocurrió en la ruta BR 101, a la altura de Osorio, aproximadamente 360 kilómetros al sur de Florianópolis. El micro regresaba desde esa ciudad hacia Posadas, ofreciendo también servicios a otras localidades turísticas como Itapema, Meia Praia, Torres, Capao de Canoa, Laguna y Garopaba.
La PRF destacó que la infracción más recurrente del ómnibus era el exceso de velocidad, contraviniendo el límite máximo permitido de 100 km/h en carreteras de un solo carril por sentido. Este tipo de infracciones son una preocupación constante en las rutas del sur de Brasil, donde las colisiones frontales representan la principal causa de muertes en accidentes de tránsito.
Aprovechando este incidente, la PRF recordó a los turistas argentinos la importancia de respetar las normas de tránsito brasileñas, como los límites de velocidad y las señalizaciones. También enfatizaron la necesidad de realizar adelantamientos únicamente en zonas habilitadas y con plena certeza de poder completar la maniobra de manera segura.
En esta temporada, varios turistas argentinos han reportado haber recibido notificaciones de multas correspondientes a viajes anteriores, las cuales debieron saldar para continuar su recorrido hacia las playas de Brasil.
El caso del micro argentino detenido subraya la importancia de cumplir con las normativas viales, especialmente en destinos turísticos donde la cantidad de vehículos aumenta significativamente durante el verano. Las autoridades locales hicieron un llamado a la prudencia y a la responsabilidad al volante para prevenir accidentes y garantizar la seguridad en las rutas.