La «clausula social» en el acuerdo con el FMI preveía que si la situación empeoraba podían ampliarse los «gastos sociales» en 0,2% del PBI, unos $ 40.000 millones. Ahora, ese monto se eleva a 0,3% del PBI, $ 60.000 millones. El Gobiero ya destinó $ 15.000 millones en el anuncio de la AUH. Quedan $ 45.000 millones para anuncios en la campaña electoral.
El FMI emitió un comunicado desde Washington en el que confirma la aprobación de la tercera revisión del acuerdo vigente con Argentina, lo cual habilita al desembolso de U$S 10.870 millones del organismo, una vez que lo apruebe el Directorio “en las próximas semanas”. Este será el cuarto desembolso del Fondo desde junio pasado, que completará un total de casi U$S 40.000 millones girados al país desde entonces. Sólo resta otro desembolso importante entre junio y septiembre próximo por unos U$S 11.900 millones.
Aunque pasa desapercibido en el comunicado, tal vez el anuncio más importante es que el FMI está dispuesto a apostar a fondo en la campaña electoral a la reelección de Cambiemos. No sólo confirma que el Gobierno podrá utilizar a partir de mediados de abril U$S 9.600 millones del préstamo al Tesoro para vender en el mercado cambiario y mantener el dólar controlado. Además, eleva los recursos que podría disponer el Gobierno en los próximos meses para anuncios sociales. Originalmente, el acuerdo preveía que se destinaran para aumentar el gasto social –si la situación económica empeoraba, como finalmente ocurrió— en 0,2% del PBI por arriba de lo presupuestado y pautado en la meta de déficit cero. Eso representaba unos $ 40.000 millones. De esos fondos extra, el Gobierno ya utilizó unos 15.000 millones para el anuncio de aumento de 46% de la AUH, anticipando desde marzo los aumentos de la ley de movilidad previstos para este año. Ahora, el FMI aceptó que ese desvío en el gasto social se eleve a 0,3% del PBI, en los cálculos de Hacienda unos $ 60.000 millones ($ 20.000 millones más de lo pautado en el acuerdo original). Pasando en limpio, si se deduce el gasto extra de $ 15.000 ya anunciado para la AUH, Macri dispondrá en lo que resta del año, en plena campaña electoral, de $ 45.000 millones adicionales a los presupuestados –e incluidos en las metas fiscales—para anuncios de gastos sociales.
¿Nuevos aumentos de la AUH, créditos subsidiados, refuerzos a la tarifa social que desde este año pagan las provincias, obras públicas que escapen a la guadaña del ajuste? Todo está bajo estudio si la economía no repunta y la situación social sigue empeorando en los próximos meses.
Como es habitual en estos comunicados, el Fondo elogia “los esfuerzos de las autoridades y la fuerte determinación para resolver los desequilibrios macroeconómicos y avanzar en su programa de estabilización”. También dice que “los altos déficit fiscal y del sector externo, los dos desequilibrios en el corazón de la crisis financiera de 2018, están en camino de una significativa corrección”. Y aunque reconoce que “la actividad económica ha estado débil”, pronostica “buenas perspectivas de una recuperación gradual”.
El documento admite que “la inflación mensual permanece alta” y que “romper la inercia inflacionaria será un proceso largo”. El FMI respalda la política del Banco Central, anunciada la semana pasada, de reforzar el “apretón monetario” (emisión cero) hasta noviembre. Y formaliza la autorización al Gobierno para vender unos U$S 9.600 millones del préstamo del FMI al Tesoro en los próximos meses, mediante operaciones cambiarias “trasparentes” de venta de U$S 60 millones diarios a partir de mediados de abril.
Como la recesión golpeó a la recaudación, que corre bastante por debajo de la inflación, el FMI avisa que “alcanzar el déficit primario cero en 2019 requerirá mayores esfuerzos para restringir el gasto público”. Ahí, aunque no se dice, las partidas en la mira son los fondos de la obra pública, que ya se prevé este año tengan un importante recorte en términos reales.
Pero al mismo tiempo, el Fondo hace un guiño a la campaña electoral de Cambiemos e insiste en la importancia en preservar el “gasto con alto impacto social”. “Apoyamos fuertemente la decisión de las autoridades de mitigar el impacto social de las políticas de estabilización, incluyendo los recientes anuncios en gasto social”, dice el comunicado, en referencia al aumento del 46% de la AUH (Asignación Universal por Hijo) a partir de marzo, a cuenta de los aumentos previstos por la movilidad previsional en marzo, junio, septiembre y diciembre.
Fuente: MM.
