Después de la aprobación de la Ley de Bases y del paquete fiscal, el Gobierno argentino está preparando una nueva versión de la reforma electoral, que planea presentar dentro de 30 o 40 días. Entre los cambios propuestos se incluiría la eliminación de las PASO, la implementación de listas abiertas y la posible introducción de la Boleta Única. Además, se está evaluando seriamente la reducción de la edad mínima para votar, que podría situarse en los 13 años.
El objetivo es que esta reforma sea tratada y aprobada antes de fin de año para que pueda aplicarse en las elecciones legislativas de 2025. El Gobierno apunta a presentar el proyecto a más tardar en agosto para avanzar rápidamente en su tratamiento legislativo.
Respecto a la baja de la edad para votar, se argumenta que debería equipararse con la edad de imputabilidad, aunque se subraya que el voto a los 13 años no sería obligatorio. Esto se enmarca en un intento por ampliar los derechos civiles y fomentar la participación política desde edades más tempranas.
El diseño de la reforma está a cargo de Lisandro Catalán, segundo en el área de Interior, bajo la supervisión del jefe de ministros Guillermo Francos y con aportes del asesor presidencial Santiago Caputo. Se espera que la propuesta genere debate y discusión en el Congreso, especialmente en relación con el financiamiento de los partidos políticos, otro aspecto contemplado para modificarse.