Una pagina de Facebook es nuevamente el móvil para la denuncia que en una imagen habla por los «Sin Voz».
Al can se lo ve en la espera, porque vaya uno a saber cuanto tiempo quedó allí, atado a la interperie, privado de andar, de alimentarse, de hidratarse, atado en un contenedor de basura en el Barrio Rivera del Paraná. Tal vez, la basura que contenía su desaprensivo dueño en la cabeza, era mucho más que el contenido de todo ese gran receptáculo al cuál lo ataron.
Con quirófano movil, atención en zoonosis, grupos animalistas y toda la solidaridad de los medios audiovisuales visibilizando la tarea de rescate, ubicación de hogares y denuncias contra el maltrato animal; así y todo, el Estado no alcanza a llegar a la concientizacion del cuidado a las mascotas. Como en cualquier lugar, siempre habrá gente irresponsable, insensible, desaprensiva, vil.
La imagen desprende diversas reacciones y bien claro, las más profunda impotencia hacia la indiferencia y el desprecio a la vida, pero en todo su diversidad ya que el contenedor debe ser mas grande que todos los cerebros que por allí pasaron y lo que menos hicieron fue dejar la basura dentro del mismo. Evidentemente una gran parte de la sociedad merece ser analizada para ver su escala de valores a un todo de su propia existencia.
Sólo esperemos un hogar pronto para este can, que irradia lo único que tiene en su cerebro y corazón, amor y lealtad.
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